Hola amig@!
Puede que el título de hoy te suene algo ambicioso y prometedor pero te garantizo que así es. No es invento mío, ni charlatanería barata. Te reto a que busques en Google «Mañanas milagrosas» y verás.
A quien madruga Dios lo ayuda…
Dentro de miles de estudios que se le han realizado a las personas que tienen éxito en la vida no hay una conclusión final de a qué se debe su éxito, pero si existe un punto en común que la gran mayoría comparte y es que se despiertan temprano, y no solo eso porque me dirás: «Si y yo también me despierto temprano y qué». Ellos tienen una rutina al despertar que les permite comenzar el día de una forma agradable y productiva, o sea «con el pie derecho».
Se dice que lo que hagas en los primeros minutos al despertar en la mañana condiciona tu día entero, es decir, si te levantas y te golpeas un dedo del pie y comienzas a maldecirlo todo, lo más probable es que tu día no sea el mejor, claro al no ser que tomes conciencia de lo sucedido y decidas cambiar el rumbo.
Mi experiencia
Cuando yo descubrí esto enseguida me puse en acción y comencé a practicar todas las mañanas algo que se llamaba: Caminata con elegancia que me comentó un amigo mío. Esta práctica consistía en caminar durante 15 minutos en una postura particular, con el pecho en alto, creyendo que eres el rey del mundo e intentando no pensar en nada más. Partiendo de la idea de que el lenguaje no verbal afecta nuestros pensamientos. Los resultados fueron increíbles y le fui cogiendo el gusto, al terminar cada caminata me sentía con más confianza, energía y alegría para comenzar el nuevo día. Poco a poco fui perfeccionando mi rutina mañanera añadiéndole afirmaciones y meditaciones.
Quien busca, encuentra…
En mi afán de búsqueda por el perfeccionamiento de mi rutina me encontré con las Mañanas milagrosas de Hal Elrod, al instante dije: «Esto es lo que yo estaba buscando». Quisiera comentarte que Hal Elrod (su creador) ahora motivador, orador y escritor, tiene una historia sorprendente y motivadora, te recomiendo que le eches un ojo.
Mañanas milagrosas consiste en la práctica de 6 Salvavidas:
Silencio, consiste en ser consciente durante unos minutos del momento presente, estar en el aquí, en el ahora, se puede meditar.
Afirmación, son oraciones cortas positivas que elevan nuestro autoestima y estado de ánimo, si se pueden decir en voz alta mejor.
Lectura, leer durante unos minutos un libro, teniendo en cuenta los efectos positivos de la lectura como fuente de conocimiento
Visualizar, hacerte una imagen mental vívida y clara de tus deseos
Escribir, se refiere a la práctica de llevar un diario personal
Deporte, se centra en poner el cuerpo en movimiento desde temprano, ya sea mediante ejercicios físicos, correr o practicar yoga.
La duración de esta rutina depende de la cantidad de tiempo del cual se disponga, no es algo estricto, generalmente se puede realizar durante una 1 hora, dedicándole a cada ejercicio 10 minutos. En ocasiones cuando disponemos de menos tiempo, 10 o 20 minutos son suficientes para llevarla a cabo. Es recomendable realizarla todas los días al despertar. «Todos los días?», sí, todos los días, de otra forma te será muy difícil crear el hábito, además tómatelo como un estilo de vida, hazla parte de tu vida diaria.
Si piensas que esto es cosa de locos que solamente lo hacen pocas personas, te equivocas, pues Mañanas milagrosas cuenta con una gran comunidad de personas que comparten los mismos intereses. Además existe un término denominado Tándem, que no es más que un compañero de cualquier parte del mundo con el que te comprometes a juntos practicar las Mañanas milagrosas. Esta grandiosa comunidad puedes encontrarla en Facebook o simplemente accediendo al Sitio oficial, te aseguro que serás bienvenido.
Pero es que es muy difícil?
Claro pues se trata de algo nuevo a lo cual no estas adaptado. Al principio puede que debido a la motivación inicial no ofrezcas resistencia pero al pasar de los días te verás tentado a abandonar, ahí es donde tu persistencia y disciplina jugaran un papel primordial. Para la mayoría, el 10mo día es el más difícil de todos.
Se dice que para adquirir y arraigar un nuevo hábito debemos practicarlo durante al menos 21 días, así que ahí tienes tu reto: PRACTICAR LAS MAÑANAS MILAGROSAS DURANTE 30 DÍAS CONSECUTIVOS.
Para terminar quisiera compartir contigo el libro Mañanas milagrosas- Hal Elrod